Consumo mundial de gas natural recupera posiciones debido a elevada demanda

Reciente informe de Agencia Internacional de Energía (AIE) así lo consigna

El consumo mundial de gas natural se recuperó un 4,6 % en 2021, más del doble de la caída observada en 2020, donde se anotó un fuerte crecimiento de la demanda durante el año pasado, lo que fue impulsado por la recuperación económica que siguió a los cierres del año anterior y por una sucesión de fenómenos meteorológicos extremos.

Así lo señala el primer informe del año de la Agencia Internacional de Energía (AIE), donde se explica que la oferta de este combustible «no mantuvo el ritmo, lo que, combinado con interrupciones inesperadas, llevó a mercados ajustados y fuertes aumentos de precios, frenando el crecimiento de la demanda en la segunda mitad de 2021».

«La dirección de la demanda a corto plazo dependerá del clima durante el resto de la temporada de calefacción del hemisferio norte. Suponiendo que las temperaturas sean normales, se espera que el crecimiento del mercado del gas natural se vea frenado por los precios más altos del gas y una expansión económica más suave, mientras que las tensiones en el suministro pueden disminuir a medida que la capacidad fuera de línea regrese gradualmente. Es probable que los precios excepcionalmente altos del gas (y, por extensión, de la electricidad) tengan un impacto más allá de los mercados del norte y la temporada actual, con algunos efectos dominó ya visibles en los mercados de importación de gas maduros y emergentes», sostiene el documento.

El informe también aborda el factor de la volatilidad de precios, especialmente en el hemisferio norte, lo cual está sujeto a las condiciones climáticas, pues «cada nueva señal de clima más frío o suministro más ajustado provoca rápidamente aumentos de precios».

«La incertidumbre sobre los precios y el suministro se mantuvo alta a principios de enero, con la mayor parte de la temporada de calefacción aún por llegar. Es probable que los patrones climáticos sigan siendo el principal impulsor tanto de los precios como de la volatilidad en las próximas semanas, aunque también hay otros factores físicos, comerciales y geopolíticos en juego», advierte la AIE.

«Los precios excepcionalmente altos del gas, y por extensión de la electricidad, han perjudicado a los consumidores, los servicios públicos y los mayoristas, y es probable que tengan un impacto negativo duradero más allá de la tensión estacional actual. Los efectos no se limitan a Europa, ya que los mercados de todo el mundo experimentan las dolorosas consecuencias de los altos precios del gas», indica el informe.

Y concluye: «La situación actual del mercado es un claro recordatorio para los países consumidores de gas de la importancia de implementar y actualizar sus cajas de herramientas de seguridad del suministro, incluidas las políticas para proteger a los consumidores y optimizar el uso de la infraestructura de gas, especialmente el almacenamiento».

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